En cuanto a las equivalencias de la titulación, si
bien el Graduado Escolar y el Graduado en ESO son titulaciones equivalentes,
el Graduado Escolar es el título que se adquiría una vez se superaba la antigua EGB (Educación General Básica).
La principal diferencia es que la EGB solo comprendía hasta los catorce años y la
ESO hasta los dieciséis (medida expuesta a continuo debate en el sector educativo
y en la política), ya que el cambio estuvo marcado por el aumento de la edad de
escolarización obligatoria. No obstante, a nivel profesional son equivalentes.
Tanto en el sector privado como el público, a todas las oposiciones a las que se puede
acceder con tan solo el Graduado en ESO
también se puede acceder con el Graduado Escolar.
En caso de que una persona solo tuviese la EGB y quisiese continuar con sus estudios,
ya fuesen de Bachillerato o de Formación Profesional, necesitaría conseguir el título de Graduado en ESO,
cursando para ello tercero y cuarto de la ESO o presentándose a las pruebas libres de ESO o
a las pruebas de acceso de la Formación Profesional, pues el Graduado Escolar y la ESO no
son equivalentes a nivel académico y no hay otra posibilidad de acceder a esas
formaciones superiores.
Sin embargo, en el caso contrario esto no se aplica. Es decir, en caso de que una
persona hubiese estado escolarizada y superado con éxito hasta el segundo curso de la ESO
(equivalente por edad al último curso de EGB), no sería equivalente al Graduado Escolar o
EGB, debido a que son planes de estudios extintos.
En cuanto a las diferencias que supuso el cambio de EGB-BUP-COU al sistema EP-ESO-FP
o Bachiller, con la ley LOGSE y posteriores, se bajó el nivel de exigencia
académica memorística, especialmente en Educación Primaria, donde se empezaron a
destacar otros aspectos como la socialización, los contenidos transversales, o las
actividades lúdicas entre las que se incluyen visitas extraescolares. Con la entrada de
la LOE, además se hace hincapié a la diversidad educativa, mientras que en la EGB
no estaba desarrollados esos aspectos, antes lo primordial eran los resultados
académicos.
En cuestión de métodos educativos, la EGB contemplaba la posibilidad de castigos y
de expulsión definitiva, mientras que con el cambio, el mayor tiempo de expulsión es
de treinta días.
En otros aspectos, la educación actual incluye las enseñanzas de idiomas desde edades
tempranas y la aplicación de nuevas tecnologías en el aula, medios de los que carecía
la EGB.
En España sigue abierto el debate sobre si los alumnos salían mejor preparados con la
EGB o si el menor nivel académico que se percibe y que es acreditado continuamente por
los informes PISA en los que se destaca el bajo nivel en idiomas y en matemáticas,
se debe a otras causas como cambios sociales, generacionales, movimientos migratorios y
cambios en la organización familiar. También existen propuestas políticas para volver a
bajar la obligatoriedad a los catorce años, ofreciendo alternativas como se hacía con el
sistema previo a la LOGSE. |
